Un poco decaído

Hola a todos.

Hoy he hecho un examen. Un examen que tenía, de teoría, aproximadamente 200 páginas, y otras 100 de cuentos para aplicarla. Lo más importante era la parte del análisis, pero claro, lo demás había que llevárselo estudiado, porque podía poner preguntas prácticas para relacionarlas con la teoría. Ha caído lo más corto.

He estado poco más de dos horas haciendo el examen, y yo, cuando pasa una hora y media, me agobio. Imaginaos cómo me sentí al ver que la pregunta más larga la vi cuando pasó esa hora y media. Esa pregunta me ha quedado fatal, así que, como mucho, aspiro a un 8,5. Pero creo que, al menos, está aprobado.

Al salir de mi casa no llovía. Ha empezado a llover al salir del autobús, y yo no llevaba paraguas. Mi compañero tampoco. He llegado a la facultad mojado y más tarde de lo habitual, porque la gente cuando llueve en Cádiz coge el coche masivamente y hay atascos.

No sé qué me pasa este año que el curso no me está motivando nada. Tengo muchos libros para leer, y no tengo ánimos para afrontarlos. Las asignaturas no me terminan de gustar, en su mayoría. Espero que en el segundo cuatrimestre, que cambio de optativas, la cosa cambie, pero de momento no tengo ganas ni de ponerme a estudiar el examen del lunes próximo, que es precisamente de la asignatura que menos me motiva.

Todo esto y algunos factores más hacen que esté escribiendo esta entrada un poco decaído. Por suerte estos periodos suelen durarme muy poco, pero ahora mismo tengo el ánimo por los suelos. No estoy saliendo a la calle, está lloviendo mucho, no tengo ganas de leer, sólo veo cine, leo blogs y escribo en Twitter. Ah, y estudio a ratos. Quiero que acabe este curso.

Perdonad por el pesimismo y el poco ánimo de esta entrada, pero se me apetecía contarlo. Gracias por soportarme.

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