Nuevas adquisiciones electrónicas

Dos de los componentes físicos de mi ordenador estaban ya en las últimas, y hace poco me decidí y los renové. Uno es el monitor, y otro el ratón.

Ratón, Genius Ergo 523 laser
Mi anterior ratón era un Logitech estándar, que me estaba chico a la mano y que, después de unos años de uso, ya no hacía scroll hacia abajo con la rueda. Otro ratón más antiguo que tenía por ahí se inventaba clicks cuando yo no los hacía, así que tocó renovar, y en la tienda de informática a la que fui me recomendaron este. Aunque es algo más caro que un ratón estándar, merece la pena.

Tiene los dos botones y la obligatoria rueda, pero además ofrece varios botones más. Dos para hacer scroll rápido arriba y abajo, y otros dos para moverse a la derecha y a la izquierda, sin tener que irnos a la barra de desplazamiento de abajo. Tiene un botón extra, que sirve para mostrar las ventanas en 3D en Windows Vista, y que aún no he configurado (no me interesa de momento).

Pero lo que más me ha gustado es que, como señala su nombre, es ergonómico. Yo tengo una mano grande, y una fea manía de coger el ratón con dos dedos. El anterior se me quedaba pequeño a la mano, y con este lo de los dos dedos resulta hasta incómodo. Se adapta muy bien a mi mano, y me resulta muy cómodo de usar.

Además, es de tecnología láser. No sé si es más preciso o no que los ratones ópticos, pero lo que puedo deciros a ciencia cierta es que no emite la luz roja como los otros.

Monitor, Samsung Syncmaster P2050
Mi monitor anterior era un HANS·G (marca que yo no conocía hasta que me trajeron el monitor) de 17 pulgadas. Tras algo más de tres años de uso, el monitor tardaba un cuarto de hora en encenderse, con la consiguiente desesperación de su dueño, que cuando vuelve de la facultad está loco por abrir Liferea. Pregunté en la tienda, que casualmente es la misma en la que me compré el ratón, y me dijeron que cuando pasa eso es que el monitor va a dejar de funcionar en breve. Así que tocó comprar nuevo monitor.

Monitor plano de 20 pulgadas, panorámico, resolución 1600x900. Estuve mirando opciones de 19 pulgadas, porque pensaba que con 3 pulgadas de diferencia no me iba a sentir cómodo, pero visto que la resolución máxima que tenían era de 1360x768, y en el monitor anterior yo tenía 1440x900, opté por el de 20. Por una pulgada más tampoco habrá tanta diferencia, pensé, y acostumbrado a tener una resolución mayor (a pesar de ser un monitor más pequeño), no me iba a sentir cómodo.

Y estoy contentísimo. Como pensé, el monitor se me queda grande, pero nada que no se pueda solucionar cambiando mi forma de trabajar. Ahora no maximizo las ventanas automáticamente, sino que busco cómo estoy más cómodo con ellas. Por ejemplo, el navegador lo tengo abierto ocupando toda la pantalla verticalmente y más o menos 1200 pixels horizontalmente, y así me va bien (no tengo que torcer la cabeza para buscar el botón para ir a la página anterior).

Ver vídeos aquí es una gozada, porque muchos se ven totalmente maximizados. Y dado el tamaño del monitor, aún mejor. Para mi sorpresa tampoco se calienta mesiado, y como último detalle diré que es táctil. Se enciende pasando el dedo por una luz, cosa que hará las delicias de mi madre cuando limpie.

Extra: Teclado Genius SlimStar G320
Debo admitirlo: esto fue más capricho que necesidad. Había cambiado el ratón y el monitor, y estaba cansado de mi teclado Logitech con las teclas muy juntas (que también me compré por capricho), así que pregunté por un teclado bueno y me recomendaron este, que tiene las teclas pequeñitas tipo portátil, muy cómodas, y 16 teclas extra para diferentes funciones.

Las 16 teclas extra me interesan bien poco, la verdad, me manejo normalmente con el ratón, pero he podido configurar bastantes en mi Debian. Aún muchas no tienen soporte, pero todo se andará. Y la verdad es que acostumbrado al anterior, que tenía las teclas muy juntas y no era demasiado ergonómico, el cambio se agradece mucho.

Resumiendo
En definitiva, el monitor y el ratón los cambié por necesidad, y estoy muy satisfecho con el cambio. Sobre todo con el monitor, porque tengo casi la misma resolución que antes y es más grande, y a pesar de mis temores iniciales me he adaptado muy bien a él. El hecho de que el ratón se adapte a mi mano y volver a tener un teclado más grande han conseguido que vuelva a estar cómodo delante del PC, y ahora mismo estoy como si tuviera ordenador nuevo. A pesar de que tiene tres años y está algo desfasadillo, mi Pentium 4 aún da de sí y es suficiente para el uso que le doy.

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