miércoles, 29 de julio de 2009

Soy lo que soy porque lo soy no porque quiera serlo

Me ha llegado una entrada escrita por el Pater, compañero de clase, de blog y amigo mío, y que, como ya pudisteis observar con Las cuatro rosas, como podéis comprobar en su blog (donde publica sus poemas y escritos, aunque lo actualiza poco) y como podréis comprobar ahora mismo, escribe francamente bien. Muchas gracias por enviar tu escrito, y por tratar un tema como éste que tan de cerca nos ocupa a los dos. Os dejo ya con la entrada.

* * *

Soy lo que soy porque lo soy no porque quiera serlo. Vivimos rodeados de personas que se creen ser algo, o alguien, por el simple hecho de tener ellos el don divino de otorgarse un don. Este mundo está quedando lejos de la humildad, esa amiga que si hoy en día sale a reducir es tan llena y camuflada por la falsedad que se convierte en hipocresía. Hace unos meses, a una persona del Carnaval de Cádiz un presentador de un programa le preguntó: “Tú eres humorista” y este carnavalero respondió: “no, yo soy humorista si tú quieres que lo sea, si tú no te ríes yo no soy humorista”. Y esto lo dice una persona que hace reír diariamente a muchas personas y en sus actuaciones arranca carcajadas.

Este hecho me hizo pensar y me hizo llevarlo a ese terreno tan bonito, donde, como Gadi, me muevo, que es el literario. En este ámbito me temo que se magnifica todo, es como un Gran Hermano cultural donde se magnifican los sentimientos. Explico esta última “metáfora”: Un escritor que en un momento dado haya tenido un pequeño éxito, o alguien le haya dicho que le gusta su trabajo, tiende a creerse el amo del mundo, o, como mínimo, el sustituto de Cervantes. Así hemos podido conocer a personas que su literatura se les ha subido tanto a la cabeza que viven interpretando un personaje, el personaje de escritor. Ese personaje que viste de forma clásica (a no ser que seas poeta que, como bohemio, puedes permitirte ir despeinado y con ropa oscura, o realmente como se te antoje, ¿por qué?, porque eres poeta y punto), que tiene una extraordinaria habilidad para levantar la ceja de la superioridad, que tiene la risa sincera más falsa del mundo, que se sienta en un sillón como si fuera un ángel en una nube, etc. Y es así porque se tienen que distinguir, porque son escritores, personas cultas, de carácter elevado, frente al populacho, ese vulgo (que curiosamente es el destinatario de sus obras).

¡Cuánto bien les haría mirarse el ombligo! En la vida tú no eres nada porque te creas serlo. Es cierto que si escribes poesía eres poeta, que si escribes ensayo eres ensayista, que si haces música eres músico, etc. Pero hay una diferencia entre ser y creer ser. Normalmente los que creen ser algo caen en la ceguera, esa que no permite ver más allá de tu propia película y que hace que no lleguemos a ser lo que somos realmente, porque, para ese individuo enfermo de ceguera, será un buen poeta (por seguir con el ejemplo del poeta) aunque sus libros no los lea nadie y su literatura sea infumable.

Por suerte, a mi alrededor hay personas que escriben, componen, etc. y que no se consideran, en grado máximo, figuras. Yo no quiero tener por amigos a figuras, quiero tener a personas, y las figuras son muñecos que ni sienten ni padecen, sólo cumplen una función… en este caso: estorbar.

¿Merece la pena vivir engañado por nosotros mismos? ¿Somos lo que creemos que somos? ¿Qué creen que somos? ¿Somos lo que creen?

Cada uno que responda según su caso.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Simplemente genial, lo que necesitaba leer hace tiempo.

El Pater dijo...

Muchas gracias, me alegro de que te guste.

Anónimo dijo...

Muy buena reflexión. y realmente muy acertada también ;)

gadi dijo...

Gracias a los dos (tres) por comentar. Me alegro de que os guste la entrada. Era un tema que hace mucho que queríamos tocar :D

Lograi el Luciérnago dijo...

¡Muy bien escrito, Pater!
Ojalá lo leyeran algunos de esos figurines... aunque estoy seguro de que, en el fondo, ellos ya lo intuyen...

Publicar un comentario

Si no tienes cuenta en ninguno de los servicios, usa Nombre/URL. A ser posible, evita la opción Anónimo.

 
Related Posts with Thumbnails