Midori (y II)

Ya os hablé una vez de Midori, pero no puedo pasar la oportunidad de hablaros de él una vez más, pues este navegador liviano cada vez incorpora más opciones y, para mí, se está convirtiendo una opción más que respetable como navegador de internet para GNU/Linux.


A día de hoy, la última versión de Midori es la 0.1.9, lo que deja claro que está en un estado muy temprano de desarrollo. Pero como he dicho, incorpora muchas opciones.

El navegador se basa en el rápido y liviano motor Webkit, que ya usan navegadores como Google Chrome o Safari, y que será adaptado próximamente por el proyecto Gnome (ya Liferea funciona con él y Epiphany está experimentando con su uso). Esto nos garantiza una rápida carga de las páginas y un respeto más que considerable a los estándares web, consiguiendo un 100/100 en el test Acid3.

Se integra perfectamente con el entorno Gnome o Xfce, y de hecho, es el navegador oficial del segundo. Esto es porque está escrito con las librerías GTK.

La interfaz es configurable. Podemos añadir botones y quitar otros, para sentirnos a gusto con las barras de herramientas. También se pueden esconder elementos, como la barra de menú.

Es compatible con scripts y estilos de usuarios, es decir, lo que en Firefox son Greasemonkey y Stylish. También tiene extensiones para añadir funcionalidades. Todo esto se gestiona con un potente panel lateral, donde se gestionan también los marcadores y donde se pueden configurar algunas cosas.

Un detalle para mí muy importante es que automáticamente busca los plugins que tiene instalado cualquier navegador Gecko para hacerlo compatible. Esto quiere decir que tenemos Flash y el plugin multimedia directamente, si ya los tenemos instalado.

Gestión de pestañas cerradas, historial, gestor de descargas integrado, gestor de cookies, consola para ver los errores, etc. Todo esto nos proporciona a día de hoy este navegador.

Aún así, para mí tiene una gran carencia que espero que su desarrollador integre pronto. En el momento que lo haga, Midori será mi navegador por defecto. Y es la gestión de contraseñas. Porque podemos entrar en los sitios, y si activamos las cookies seguirá conectado con dicha cuenta, pero no tenemos un gestor que los recuerdo.

Mi recomendación es que lo probéis. En los repositorios está, aunque no la última versión, y la compilación es muy sencilla.

Este navegador cada vez va a mejor, y en cuanto integre un par de características más, como la gestión de contraseñas, se convertirá en el navegador por defecto de muchos usuarios de GNU/Linux.

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